la medula espinal de los gatos

abril 21, 2010

Disuadido.

Desde aquí te veo.
Aun la niebla no te ha vuelto difícil de distinguir.
Todavía no es la hora, pero igual me esfuerzo para verte.

Entre mi sitio y el tuyo, hay un espacio
que no es un abismo, ni un averno
es un invierno lerdo.

Y esa niebla, mi niebla,
esa que esta cubriéndote
tiene un color ceniza de papeles que aun no llenado
de mis sueños de despierta,
y  de mi labia… Inservible

Y así, como tu invierno,
que usurpa ese espacio. (Justicia)
Que no es ni mío, ni tuyo. Es nuestro.
Se abre
la espera. Una espera perdida.
Pero igual, me esfuerzo para verte.